jueves, 26 de noviembre de 2015

Errores en la limpieza de tu hogar que debes evitar





Si buscas mantener los espacios de tu hogar limpios por más tiempo pero crees que algo estás haciendo mal pues, más tardas en asear que en lo que ya está sucio de nuevo, te damos algunas ideas para que la limpieza sea más eficiente y evites los errores que probablemente estás haciendo.


No limpies tus ventanas en un día soleado
Los jabones para cristales se secan mucho más rápido con el contacto directo de la luz solar, pero éste puede dejar rayas en las ventanas. Es por ello que, el momento ideal para lavar los cristales es la tarde noche o bien, cuando el cielo está nublado. Para un secado perfecto usa las escobillas de goma.

Evita rociar limpiador directamente sobre una superficie
Este método está bien de vez en cuando, pero se debe reservar para superficies muy sucias que necesitan solución extra. Sin embargo esto no debería ser una práctica cotidiana, ya que los líquidos o soluciones dejan residuos y pueden dañar las superficies de tus muebles. En su lugar, rocía la fórmula sobre un paño de microfibra. De esta manera también ahorrarás, pues necesitas menos cantidad de solución.

No limpies sin usar algún tipo de protección para tus manos
la piel absorbe casi cualquier sustancia con la que nos encontremos en contacto. Incluso

los productos naturales pueden resecar tus manos. Debes protegerlas con guantes que tengan un interior forrado de algodón, pues los de goma o látex no crean barreras de protección.

No limpiar adecuadamente las manches en alfombras
Tratar de quitar manchas de orina de mascotas, vino tinto, o café es difícil y a menos que hayas tratado a tiempo la mancha, ésta resurgirá con el tiempo o se notará. Así que, prueba este método: utiliza un paño seco para absorber la mayor cantidad de líquido posible. A continuación, rocía la mancha con agua mineral o agua con hielo y absorbe con otra toalla seca. Repite hasta que notes cómo se va eliminando la mancha de tu alfombra. Si ésta persiste, aplica un quitamanchas y repite el mismo proceso.

No limpiar tu esponja de cocina
Dado que los alimentos y las bacterias se esconden en las grietas de una esponja, un enjuague con agua no es suficiente. Así que una vez o dos veces a la semana, tira tus esponjas. Otra opción es utilizar un desinfectante y después de usarla, aplica un poco diariamente.